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La caza y el cambio climático

11 de marzo de 2023
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¿Qué relación hay entre ambos?

El cambio climático es uno de los mayores desafíos a los que nos enfrentamos como humanidad. Los efectos de este fenómeno se hacen cada vez más evidentes, y la caza no escapa a su influencia. A pesar de que existen muchas formas diferentes de contribuir al calentamiento global, la caza es una actividad que también tiene un impacto significativo sobre el medio ambiente.

Es importante entender que la caza no sólo afecta directamente a los animales, sino también al ecosistema en el que viven estos animales. La destrucción del hábitat natural de los animales, así como la eliminación de sus presas naturales, son dos problemas graves causados por la caza excesiva. Estas consecuencias son particularmente graves cuando se trata de especies amenazadas o en peligro de extinción, como muchos tipos de aves migratorias o carnívoros grandes.

Además, los métodos utilizados para matar a estos animales tienen un impacto significativo sobre el medio ambiente. El uso excesivo y abusivo de armas con munición química o explosiva puede contaminar el suelo y las aguas subterráneas con sustancias químicas dañinas para otros organismos vivientes. Esta contaminación puede ser extremadamente perjudicial para otros animales, plantas y microorganismos presentes en el área afectada.

Por otro lado, las actividades relacionadas con la caza también contribuyen al calentamiento global debido al uso excesivo y descontrolado de combustibles fósiles para transportar equipamiento pesado o para viajar largas distancias en busca de presa u otros objetivos relacionados con la caza. Esta práctica contribuye significativamente al incremento del dióxido de carbono (CO2) en nuestra atmósfera, lo que contribuye directamente al calentamiento global.

Finalmente, hay que considerar también el hecho de que muchos animales silvestres son sensibles a los gases nocivos producidos por actividades humanas comunes como la combustión de combustibles fósiles o incluso la agricultura intensiva. Esta sensibilidad hace que estés animales sean particularmente vulnerables ante los efectos del calentamiento global; por lo tanto, cuando se les causa daño directamente mediante la caza excesiva o indirectamente debido al deterioro del hábitat natural causado por esta práctica indiscriminada, están expuest@s a mayores riesg@s ante el descontrol climático mundial actualmente vigente.

Desde el punto de vista veganista es obvio que debemos proteger nuestro planeta evitando toda forma posible de explotación animal; incluida la explotación animal inherentemente implicada en la práctica deportiva llamada “caza” . Si bien hay muchas formas diferentes de ayudar a combatir el calentamiento global, prohibir completamente la caza es un paso importantísimo para reducir su impacto negativo sobre nuestro planeta y sus habitantes silvestres.